30 junio 2011

El Blog del Marketing

Se innaugura un hotel para plantas.


Ahora lo tengo claro. El mundo se acaba.

O eso, o nos hemos vuelto gilipollas. ¿Un hotel para plantas? Es cierto que fastidia volver de vacaciones y encontrarte con las plantas medio muertas (si bien, afortunadamente, hay soluciones de emergencia que poco tienen que ver con hoteles y que consisten en el avanzado e innovador método de "le dejo la llave a mi vecina la cotilla"), pero de ahí a inventarse un concepto como Hotel para plantas... pufff... creo que va demasiado.

Estoy seguro que forma parte de la estrategia de posicionamiento del servicio. Del mismo modo que hay gente (tengo amigos que lo hacen) que paga 1000 euros para que les cuiden de su perro durante sus vacaciones o que llevan al can a que le corten el pelo en una exclusiva "peluquería canina", pues también habrá gente que esté enamorada perdidamente de sus plantas y fauna variada como para decidir pagar una cantidad para que estas tengan todos los lujos y comodidades del mundo y ellos -y su conciencia- puedan irse tranquilamente de vacaciones.

Pero atención al detalle, y es que los preocupados dueños de dichos seres vivos -preocupados por cómo se encontrarán durante el abandono estival- pueden comprobar el estado de sus plantas gracias a una webcam que  les permite asegurarse que las mismas están en buenas manos (definitivamente nos hemos vuelto locos)

Si te apetece participar en esta ecológica e innovadora experiencia "plantil", envía a tus seres vivos verdes (marcianos no permitidos) al Hotel para plantas del centro comercial Islazul.

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