Parece que fue ayer cuando me pasé una noche en la que mi mujer (embarazada de nuestro hijo mayor, Jaime) estuvo con muchísima fiebre... y yo no salí de casa en todo el fin de semana, mientras ella pasaba la gripe en la cama.
Y entonces recordé la conversación con mi amigo Esteban en una noche de concierto de los Del Tonos, dos días atrás, en la que me preguntó si "había visto eso de los blogs". Me acordé y me puse a investigar... y ese mismo domingo arrancó esta emocionante aventura de El blog del Marketing.
12 años después, he compartido con vosotros 3.309 post. Algunos divertidos, algunos absurdos, otros frescos, muchos espesos... pero todos con mi máxima ilusión, aprovechando la ventana de expresión que me daba el blog.
12 años después y más de 3 millones de páginas vistas, he de reconocer que el blogging ya no me excita como antes. No tengo esa neurona "always on" que tenía antes. No tengo tanto tiempo, ni la misma motivación (aún sin tener tiempo)... y reconozco que de algún modo he sustituido el blog por las series. Así que amigo, si eres de los pocos lectores fieles que siguen aquí, puedes echarle la culpa a Netflix de mi poca presencia en los últimos meses. O quizás tengas que darle las gracias después de todo.
En fin, sea como fuere, solo quería daros las GRACIAS por estar ahí. Da igual si has comentado mucho o poco. Si me lees a veces o siempre... o incluso si este post es la primera noticia que tienes de El blog del Marketing.
Sea como sea, gracias por tu tiempo y por estar ahí. No me voy. No es un adiós ni un hasta luego. Es un GRACIAS como un piano.
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