24 mayo 2012

El Blog del Marketing

Estás terminando tu carrera universitria... ¿ahora qué?

La cosa está muy malita. Hay mucho paro -especialmente entre el segmento más joven de población- y además la gente que está en búsqueda activa de empleo se encuentra con que sus "competidores" (en las mismas precarias condiciones que ellos mismos), cada vez son más fuertes.

Si hace unos años (y hablo de cuando yo terminé mi carrera universitaria, en el año 1998), podías considerarte un privilegiado por cursar un Master -y más aún si era en una prestigiosa escuela de negocios- hoy en día los Master se ven como churros aquí y allí. El más tonto ha hecho dos Masters y además es bilingue. 

Pero además, es posible que los recién titulados, tengan que competir con gente que ha salido del mercado laborar (despedidos probablemente) y que además cuentan con experiencia y un currículum más completo que los alumnos recién salidos de los hornos universitarios.

¿Qué hacer?

Lamentarse diciendo que la cosa está muy mal, y que la generación que les ha tocado vivir está envuelta en una de las peores crisis económicas de la historia de nuestro país.

Si bien seguro que esta respuesta os suena, la actitud en sí deja mucho que desear y aunque fuera cierto, es lo que hay (no creo que por ejemplo nuestros abuelos, con la guerra y la post-guerra tuvieran una situación mejor, y se buscaron las castañas).

A mi se me ocurre que ir a estudiar/trabajar al extranjero (sí, volvemos 50 años atrás) no es mala opción. Refuerzas tu segundo o tercer idioma, aprendes de otras culturas y formas de pensar... abres tu mente y con suerte consigues un trabajo remunerado para empezar a curtirte el cobre por ti mismo.

Otra opción, si no te apetece viajar y moverte de tu país es seguir estudiando (ojo, que puede llegar a ser una situación cómodamente peligrosa y tendente a infinito), y hacer un Master de postrado por ejemplo en el IEP (Instituto Español de Postgrado), o en muchos otros sitios, que te aseguran por ejemplo un grado de especialización más alto y de ese forma, perfilar un poco más tu expediente académico sin necesidad de haber trabajado.

Además del networking que pueda generar un Master, la verdad es que es una experiencia muy enriquecedora en cuanto a trabajar en entornos multidisciplinares en grupos de trabajo absolutamente heterogéneos, y sobre todo -al menos así fue en mi caso- en cuanto a ciertas formas de trabajar, o el sentido de la responsabilidad que te da el saber que de nada sirven las excusas de que si el perro se ha comido tus apuntes, la impresora ha explotado, o se ha muerto tu perro... porque a un Master, al trabajo, al reto blogger... a la vida, SE VIENE LLORADO DE CASA!!!

No hay comentarios: