23 mayo 2016

El Blog del Marketing

El extraño caso de las New Balance 1080v5 [@newbalanceES vs @brooksrunning]

Definitivamente puedo confirmar que las New Balance 1080 v5 y yo somos incompatibles.

Hace un año aproximadamente me compré las NB 1080 por recomendación de mi amigo Peter, que hablaba maravillas de esas zapatillas de máxima amortiguación, y decidí ponerle los cuernos a mis Brooks Glycerin (modelo que usé los 3 años anteriores)

Las estrené y sentí magia en los pies. No pesaban nada, y la sensación de amortiguación era increíble. Notaba como si apenas pisara el suelo. Como si las zapatillas rebotasen en cada zancada... pero pronto descubrí que no todo era tan bonito como parecía durante el primer mes.

De pronto noté unas molestias bastante intensas en el empeine del pie izquierdo que -obviamente- no atribuí en ningún momento al cambio de zapatillas. Pero un día en el fisio, me preguntó si había cambiado de hábito al correr. "Cambio de superficie o de zapatillas. No hay otra opción", me dijo. Y poco a poco empecé a darme cuenta de que el único cambio real en mi forma de correr se debía a las NB 1080 de las que tan contento estaba.

No había incrementado el número de kilómetros ni había cambiado de superficie. Y entonces me acordé de cuando mi amigo Sergio (Deporr.com) me asesoraba sobre las zapatillas con máxima amortiguación usando un "palabro" desconocido para mi allá por mis inicios, cuando me decanté por las Brooks Glycerin. ESTABILIDAD.

Poco a poco fui aparcando las zapatillas nuevas y compré una nueva edición de las Glycerin (13). Con dolor iba espaciando mis entrenos y después de la semana de vacaciones de Benicassim, dí por curada la lesión del empeine que me tuvo loco durante 3 meses. A partir de ahí fui incrementando el número de kilómetros a la semana y olvidando los dolores tan extraño en el empeine izquierdo.

Hasta ayer, que me dió por correr 8,5 km con las New Balance. Durante los primeros 2 km notaba algo raro en el empeine izquierdo... pero pensé que era un poco histérico y que seguro que era una sensación que pasaría. Y pasó. Al rato apenas notaba más que la sensación de flotar en el asfalto.


Sin embargo al día siguiente (hoy) tengo un intenso dolor en el mismo punto en el que me lesioné el año pasado. Y tengo las cosas más claras. No volveré a correr con las NB 1080, por muy buena crítica que tengan y por muchos cientos de corredores que vea con ellas. A mi no me van bien. Debo pisar de algún modo con mi pie izquierdo de forma que acabo haciéndome daño.


Así que de momento puedo decir que en mis pies, han ganado las Brooks Glycerin y que en cuanto salga a la venta la versión 14, las compraré y seguirán siendo mis zapatillas de cabecera.

No hay comentarios: