28 marzo 2007

El Blog del Marketing

Atención al... ¿cliente?

Prometo al menos intentar ser racional y expresarme con tranquilidad, porque tengo un calentón de los importantes.

Resulta que llevé mi coche a la clásica (y a todas luces innecesaria) revisión anual. Aprovechando que tenía que quedarme sin coche unos días, les comenté que de paso cambiaran el faro antiniebla delantero izquierdo, porque estaba roto.

Hasta ahí nada raro. Se que me voy a quedar un día o dos sin coche, pero ya me arreglaré para ir al trabajo.

Hoy me llaman del concesionario oficial (Gerar Motor, en Alcobendas) pare recoger el coche, porque está todo arreglado... ¡qué bien... en un día y pico lo tengo otra vez!

Pago la revisión (obligatoria en concesionarios oficiales) si quiero que la garantía pase de 3 a 5 años y cuando me dan el coche, meto la primera, la segunda y.... ¡¡ coñoooooo !!... ¡¡tengo la luna delantera rajada !!

Inmediatamente llamo por teléfono para decir que hay una raja en mi cristal que antes no estaba, pero una "amable" señorita me contesta que no queda nadie en el taller y que ella está en ventas, y no puede atenderme, que pase por allí a las 3.

Sin volverme loco aparezco a las 3 en punto y el jefe de taller me dice que es imposible que se les haya roto a ellos... que ya estaba así. Pero si tengo cobertura de lunas gratuíta en mi seguro... ¿crees que aprovechando que dejaba el coche aquí no hubiera dado parte también por esta raja?

Hablo con el jefe de post-venta y obviamente se pone de parte de su empleado, pero lo sorprendente es que ante mi argumento de que llevo el coche a ese taller desde hace 3 años, paso todas las revisiones, cambios de aceite y demás movidas en su taller... etc... le sugiero que haga una cuenta sencilla: coste de luna y asumir su error vs. no volver a verme el pelo.

El tio mira arriba... piensa y dice... "no se puede demostrar que haya sido error nuestro"

De acuerdo, asunto terminado.

Ahora la teoría dice que no me volverán a ver el pelo (ni obviamente mi coche) en el resto de sus días, pero la realidad es bien distinta... con un taller a 5 minutos andando de mi trabajo, y otro a tomar vientos... agacho la cabeza, meto el rabo entre las piernas y le digo... "¿y para dar parte de esto, he de abrir nueva incidencia?

Resultado: Taller 3 - Pedro 0

Por tonto, pero... ¿me quedaba alternativa sin tirarme piedras a mi mismo y las molestias derivadas de buscar otro taller que estará más lejos de mi casa???... prefiero pensar que no

6 comentarios:

erg morito dijo...

Pedro,

Sin "retrato" por su parte yo no cedería.

Pedro Molleda dijo...

Estoy de acuerdo contigo, pero cuando ves que el tipo se "enrroca" y no sale de su casilla... poca opcion me queda

Sea como fuera, ya es tarde. Mañana me devuelven mi coche con luna nueva

Gracias por tu consejo anyway

Anónimo dijo...

hay una cancion de celtas cortos cuyo estribillo es "jodete y baila". Parece que eso es lo que nos queda la mayor parte de las veces.

Y a ti, al menos, no te ha costado más que un par de días. Mira lo que me pasó a mi:

http://molleda.blogsome.com/2006/11/20/me-siento-totalmente-estafado-selectronic-oviedo/

Solo queda no volver a pisar esta tienda (evidentemente) y conseguir un buen pagerank en google y así, con un poco de suerte, dejar las cosas claras a cualquier futuro cliente.

un saludo.

Pedro Molleda dijo...

Pues si... la verdad es que tienes toda la razón, pero el problema es que el taller está al lado del trabajo... y llevarlo a cualquier otro sitio es peor para mi, así que hasta que no pongan otro taller más cerca, tendré que seguir tragando con estos impresentables

Joaquin Valverde dijo...

Asi es la vida. Yo de atencion al cliente se un huevo ya que trabajo con clientes en el hotel a diario. Y yo si hubiera sido el del taller habria dicho, tiene usted razon y nos encargaremos de arreglar la luna, despues de todo el cliente tiene la razon y dada las circumstancias seguro que Pedro tiene razon.

Quiero decir tambien que a veces el cliente "no" tiene la razon, incluso en ese caso uno tiene que, como negocio, aguantarse y decir si estimado cliente, usted tiene la razon. Puedo extenderme en este tipo de casos ya que me han sucedido unos cuantos, pero lo dejo para otro dia

Pedro Molleda dijo...

La verdad es que tienes toda la razón. A veces las cosas parecen sencillas, pero hay gente que se empeña en complicarlas hasta límites absurdos

De todos modos soy de la opinión de que el tiempo pone a cada uno en su lugar... aquello de "arrieros somos... y en el camino nos encontraremos"